El zinc es un “mineral esencial” porque es necesario para la salud de los seres humanos. Como el cuerpo humano no almacena mucho zinc, debe consumirse de manera regular como parte de nuestra dieta. Podemos encontrar el zinc en los pescados y las aves. Aunque si no se consumen es ideal aportarlo mediante suplementos.
La deficiencia de zin puede causar:
- Baja estatura
- Mal funcionamiento de testículos y ovarios
- Disminución en la capacidad de saborear los alimentos
Previene:
- Retraso de crecimiento
- Diarrea en niños
- Cicatrización lenta de heridas
- Enfermedad de Wilson
- Infecciones agudas del tracto respiratorio inferior
- Gripe porcina
- Zumbido de oídos
- Lesiones cerebrales graves
- Malaria y otras enfermedades causadas por parásitos
- Degeneración macular
- Ceguera nocturna
- Cataratas
- Asma
- Diabetes
- Presión arterial alta
Entre sus beneficios están:
- Aumentar el sistema inmune
- Mejorar el crecimiento
- Tratamiento de resfrío, gripe, infecciones en los oídos y vías respiratorias
Ayuda a tratar:
- Depresión
- Anorexia
- Trastorno obsesivo compulsivo
- Demencia
- Boca seca
- Trastorno de hiperactividad
- Déficit de atención
- Acné
- Úlceras del pie por diabetes
- Sensibilidad del el gusto disminuida (hipogeusia)
- Encefalopatía hepática
- Enfermedad hepática por alcohol
- Enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa
- Enfermedad intestinal inflamatoria, aftas úlceras estomacales
- Úlceras en las piernas y úlceras por presión
Algunos atletas ingieren el zinc para mejorar su rendimiento atlético y fuerza.
Fuente:
https://medlineplus.gov/spanish/druginfo/natural/982.html